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Historia

Israel

Israel

A las cuatro de la tarde del 14 de mayo de 1948 se hizo la proclamación oficial de la creación del estado de Israel.
 

Se crea como consecuencia de las presiones ejercidas por el movimiento sionista internacional, después de terminada la Segunda Guerra Mundial

Los aliados, vencedores de la Segunda Guerra Mundial lograron de la Organización de las Naciones Unidas, a pesar de la oposición de los países árabes, que el territorio de Palestina se dividiera en dos estados: uno árabe y otro judío. Dentro del territorio concedido por la ONU a los judíos para la creación del estado de Israel, no estaba considerada Jerusalén. Al dividir el territorio palestino, las fronteras judías no invadían territorios de los estados árabes.

El 1º de diciembre de 1947 el comité ejecutivo árabe decidió llevar a cabo una huelga como protesta contra la ONU por el otorgamiento de territorios palestinos a los judíos. Los árabes que vivían en el territorio otorgado a los judíos comenzaron a retirarse de dicho territorio. La Liga árabe se reunió en el Cairo, dos semanas después de la decisión de la ONU, y determinó enviar tropas a Palestina para comenzar operaciones guerrilleras. Los árabes comprendieron que la rendición o destrucción de Jerusalén implicaba para los judíos la disminución de su valor y resistencia por la importancia moral y religiosa de esta ciudad para éstos.

A su vez los judíos se organizaron para iniciar la ofensiva contra los árabes, muriendo en el primer intento un comandante árabe. La administración nacional judía se dedicó a elaborar la Declaración de Independencia sin precisar las fronteras del nuevo estado, contraponiendo las disposiciones de la ONU.

Un rey de leyenda

“Bravo, apuesto, impulsivo y amante de la poesía, parecía más un romántico caballero que un rey”, así lo define el historiador Christopher Hibbert.
Este bisnieto de Guillermo el Conquistador había nacido en Oxford, el 8 de septiembre de 1157, pero se consideraba más francés que inglés. En la fecha de su coronación, en la Abadía de Westminster, el 3 de septiembre de 1189, ya se había comprometido para participar en la Tercera Cruzada. Sus detractores lo culpan de haber esquilmado a su pueblo para invertir el dinero en sus aventuras fuera de su país. De hecho, de los diez años que duró su reinado apenas pasó cuatro meses en Inglaterra.
Posiblemente es el rey medieval más famoso, uno de los más representados en el cine y más biografiados.
¿Sabes ya de quién hablamos?
(Si no, lee el primer comentario)

Sueños y pesadillas

Lincoln, Garfield, McKinley y Kennedy. Es fácil averiguar el nexo común entre estos cuatro presidentes de Estados Unidos. Se podría hablar de cuatro casos en los que se ha dado la vida por servir al pueblo, aunque no podemos decir que nos refiramos a héroes o mártires. El republicano William McKinley ocupaba la Casa Blanca desde 1897 y había vuelto a ganar las elecciones en 1900. Unos meses después de volver a hacerse cargo de la presidencia, el 6 de septiembre de 1901, McKintley presenciaba la Exposición Panamericana en Buffalo (Nueva York) cuando recibió los disparos de Leon Czolgost. Leon había llegado a los Estados Unidos en el vientre de su madre, una inmigrante checa. Nació en Michigan en 1873, entre la crisis de la industrialización y el sueño americano, aunque Czolgost nunca entendió su propia historia, dentro de la historia económica de los Estados Unidos. Leon actuó solo y asumió sus actos. Se dijo que estaba loco, aunque durante el juicio mantuvo la compostura.
El presidente se debatió entre la vida y la muerte durante ocho días. Murió el 14 de septiembre, a los 58 años de edad. El asesino fue condenado a muerte. El jurado sólo tardó 34 minutos en tomar su veredicto. Fue electrocutado en Auburn, en la prisión del estado. Tenía 28 años de edad.

Los albores del huracán

1 de septiembre de 1939.
Pesados carros de combate y oscuros bombarderos cruzan la frontera que separa Alemania de Polonia. La excusa es reconquistar la ciudad de Danzig, junto al Báltico, que los alemanes reclamaban desde el Tratado de Versalles. Pero no todo terminó allí. La invasión de Polonia se llevó a cabo por el norte y el oeste. Dos semanas después, el ejército polaco casi había desaparecido.
Después de Checoslovaquia (invadida el 14 de marzo) y Polonia llegarían Dinamarca, Noruega, Bélgica, Holanda, Francia... Los aires de grandeza y la manía megalómana de un loco no tienen límites.
Todo empezó en Danzig. La historia terminó en el resto del mundo.